Porque no he vuelto a hacer nada...

Como ya sabéis el día 25 de julio Aburrimiento Patológico cumplió un año. Pues desde ese día he estado revisando todas mis entradas como el típico abuelo que te cuenta todas sus batallitas de cuando era joven. Lo cierto es que el blog ha madurado, ha ido cambiando, sobre todo en la frecuencia en la que actualizó. Al principio era joven, vitalista y con ganas de comerme el mundo, por eso actualizaba casi a diario. Ahora estoy en una fase más reflexiva (osea más vago) en la que actualizar cuesta cada vez más.

Sin embargo, y por qué no decirlo, lamentablemente, hay algo que no ha cambiado. Algo que sigue igual desde que empecé este blog, estoy en la mierda un verano más. Es ese aburrimiento, como el propio nombre del blog indica, el que hace que esto siga teniendo una esencia patética y autocompasiva.

¿Qué cómo me he dado cuenta de esto? He estado revisando una entrada que en su momento no tuvo ninguna trascendencia, pero creo que es la entrada que más define este blog. Por eso os la vuelvo a colgar para que os fijéis que después de un año no ha cambiado practicamente nada

El día en que esté ocupado, de vacaciones o simplemente con algo mejor que hacer que este blog ¿desaparecerá? ¿Cambiará?